Érase una vez en un pueblo muy lejano que siempre estaba lloviendo y nunca salia el arcoiris, aquel pueblo era muy descolorido la gente de allí era aburrida, antipática... un día iba paseando un duende de los colores y quiso arreglarlo pero el solo no pudo entonces se fue otra vez al país de los colorines y trajo a sus amigos. Al día siguiente llegaron y empezaron con los paraguas ya que siempre estaba lloviendo,a continuación pudieron poner color y alegría en aquel pueblo y colorín colorado este pueblo ha acabado colorado
Deberías haber puesto algún punto más en la primera parte. Recuerda que paraguas no lleva diéresis. Paragüero sí.
ResponderEliminarLa historia es muy bonita.